Las renovables en India recibieron un total de 6.600 millones de dólares de inversión en el segundo trimestre del año, superando el total de inversión del año 2020
El sector de las energías renovables en India está de enhorabuena. El segundo trimestre del año ha supuesto un revulsivo para los inversores, que han destinado una cuantía superior a toda la invertida el pasado año y que asciende a un total de 6.600 millones de dólares, frente a los 6.400 millones de dólares destinados a las renovables indias durante el 2020. Este rebote de inversión en el segundo trimestre, producido por la caída registrada en 2020 debido a la pandemia del COVID-19 (estimada en un 24% según el Instituto Indio de la Economía Energética y Análisis Financiero), pone las bases de una recuperación sectorial que, según las propias estimaciones recogidas en la nota informativa de la IEEFA, podría consolidarse a finales de año superando el techo de los 8.400 millones de dólares de inversión del 2019.
Según explica la propia IEEFA, la mayor parte de este dinero se ha canalizado a través de política de adquisiciones, ayudando a reciclar el capital en nuevos proyectos de energías renovables en India. Uno de los grandes movimientos fue el producido por la salida de Softbank del sector energético indio, que propició la venta de activo por valor de 3.500 millones de dólares a Adani Green Energy Limited (AGEL); operación que hace de AGEL uno de los actores clave en las renovables indias, así como el mayor desarrollador de energía solar fotovoltaica en el mundo.
Otros acuerdos clave que ayudaron a impulsar las inversión en renovables en India han sido la adquisióc de Engie por parte de Edelweiss Infrastructure Yield Plus, en una operación que rodeó los 550 millones de dólares; la compra de Acme por parte de Scatec Solar, estimada en unos 400 millones de dólares; y la adquisición de Fortum por parte de Actis mediante el pago de 333 millones de dólares. A estos acuerdos se suman diferentes movimientos sobre deuda, inversión de capital, bonos verdes y financiación intermedia; siendo los bonos verdes uno de los principales pilares de atracción para inversores, dado su plazo medio de 7,25 años con una tasa de interés fija del 4,5%.
Todos estos movimientos no hacen sino confirmar que el modelo energético indio sigue dando sus pasos para adecuarse a la necesidad de electrificar su economía.