Un informe de la compañía suiza Acronis asegura que la vulnerabilidad a este tipo de ataques ransomware sigue aumentando y augura cifras récord de daños
Los ataques ransomware siguen creciendo y creciendo. Más allá de ser una mera sensación, esta afirmación se ha convertido en un hecho fehaciente, tal y como expone el último Informe de Medio Año sobre Ciberamenazas de la compañía suiza Acronis. “El ransomware está empeorando, incluso más de lo que predijimos”, afirma el documento que, además, estima en una cifra superior a los 30.000 millones de dólares los daños causados por este tipo de ciberataques para el año 2023.
Así, el informe advierte de que los atacantes utilizan técnicas de phising, principalmente, con hasta 600 campañas de correo electrónico malicioso irrumpiendo en la red durante el primer semestre de 2022. Con esto, el 58% de los correos electrónicos maliciosos detectados correspondían a campañas de phising y otro 28% a malware; según informa la propia Acronis.
Por otro lado, la firma suiza afirma que “a medida que aumenta la dependencia de la nube, los atacantes se han centrado en diferentes vías de entrada a las redes basadas en la nube.” Así, los cibercriminales ahondan en las fallas de seguridad y vulnerabilidades que encuentran a través de software sin actualizar o sin parchear; algo que ha provocado un sorprendente aumento en sistemas operativos como Linux. Brechas que, una vez explotadas, los ciberdelincuentes tratan de utilizar para recibir pagos por información aprovechando la irrupción de las criptomonedas y los sistemas financieros descentralizados.